Sobre tejidos para la protección solar

Tejidos para la protección solar: hechos básicos y términos clave
Si bien puede parecer obvio que los protectores solares protegen los espacios de los rayos del sol, hay una gran variedad de cualidades y características que afectan el rendimiento de diferentes filtros solares, dependiendo del efecto deseado. Vienen clasificados del 0 al 4 según su influencia en la comodidad térmica y visual.
Protección contra el sol
El factor de apertura de un tejido de protección solar es el área relativo de las aperturas de las fibras en el tejido del que está hecha, lo que afecta la cantidad de luz que se transmite a través del tejido La luz solar viene en tres tipos: visible (detectada por ojos humanos), UV (perjudicial para la salud) y luz IR (calor).

Otras propiedades relacionadas con la luz de los filtros solares incluyen el control del deslumbramiento, la privacidad nocturna, el contacto visual con el exterior y la utilización de la luz del día. Todos estos se ven afectados por el color, el tejido, el contraste y la composición del tejido de protección solar.
Confort térmico
El confort térmico es otro factor importante a tener en cuenta a la hora de elegir la protección solar perfecta para su espacio. La luz puede ser absorbida, reflejada o transmitida por una tela en diferentes combinaciones para diferentes ambientes.
Acristalamiento
El acristalamiento siempre se utiliza como respaldo de la tela de protección solar, que en conjunto evita que una cantidad significativa de energía solar no deseada entre en un espacio. Debido a que los tejidos más oscuros absorben más luz, son más adecuados para aplicaciones en espacios exteriores, ya que no hay ningún efecto en la sala que se filtra. Los tejidos interiores pueden transferir calor a un espacio, por lo que es ideal elegir colores más claros.